Iglesia Católica de San Francisco: Ataque a una de las fiestas cristianas más importantes: el estado es incapaz de proteger a los cristianos en Nigeria
Un hombre armado atacó a los fieles en el Iglesia Católica de San Francisco en la ciudad nigeriana de Owo durante una misa el domingo de Pentecostés. En el ataque, unas cincuenta personas murieron, incluidos niños. La presencia de extremistas religiosos armados en Nigeria es una amenaza creciente para los cristianos.
“Este último ataque no puede explicarse únicamente por el conflicto entre los agricultores y los pastores nómadas; hay que declarar que este ataque a una de las fiestas cristianas más importantes estaba dirigido contra los creyentes cristianos“, dijo el eurodiputado György Hölvényi.
El eurodiputado demócrata cristiano dijo en un comunicado enviado a The European Times que aún no se conoce la identidad del perpetrador, pero que ataques similares se han llevado a cabo contra comunidades cristianas desde hace años. Entre 2015 y 2020, alrededor de 12.000 cristianos fueron asesinados por su fe.
“Aunque el gobierno central de Nigeria se ha comprometido a frenar el terror, todavía no vemos ningún resultado real.”, dijo Hölvényi. El eurodiputado subrayó: “El ataque actual ha tenido lugar en el suroeste de Nigeria, que hasta ahora no se ha visto afectado por la violencia. Este es un motivo de preocupación y una señal del deterioro de la situación de seguridad.”.
El político agregó: “La falta de presencia del gobierno en Nigeria ha llevado a una serie de ataques brutales que han provocado que Nigeria ocupe el séptimo lugar en la Lista de Vigilancia Mundial de Puertas Abiertas sobre la persecución cristiana.“.
El eurodiputado György Hölvényi subrayó que el Parlamento Europeo y la UE no pueden quedarse de brazos cruzados ante esta situación y no pueden decidir por motivos ideológicos apartar la cara de las víctimas. “Cada eurodiputado debe trabajar dentro de su propio grupo político para garantizar que el PE, que tan a menudo invoca los derechos humanos, pueda reconocer y condenar la evidente y violenta persecución de los cristianos”, dijo Hölvényi al tiempo que subrayó que “¡La UE debe enviar una señal clara! Este es nuestro deber moral como políticos europeos.“.