Valentine Rugwabiza, jefe de la misión de mantenimiento de la paz de la ONU en el país (MINUSCA), informó a los embajadores sobre los importantes avances que se han logrado en la implementación de un acuerdo de paz clave de 2019 entre el Gobierno y los grupos armados.
Hizo hincapié en la importancia de la disolución tras los “compromisos activos” del Gobierno en abril, de dos grupos armados y otras tres facciones militantes, todos signatarios del acuerdo.
Sin embargo, para que el desarrollo produzca dividendos reales, subrayó que los excombatientes debían ser rápidamente desarmados y reintegrados a la sociedad civil.
Hizo un llamado a los socios de CAR para que brinden apoyo adicional para que esto suceda.
Referéndum constitucional, elecciones locales
El titular de la MINISCA saludó el anuncio previo del Presidente de la CAR de realizar un referéndum sobre una nueva constitución el 30 de julio.
Sin embargo, lamentó que esta iniciativa nacional haya resultado en una suspensión temporal de los preparativos para las elecciones locales, que son muy necesarias para empoderar a las comunidades de todo el país y facilitar la descentralización del proceso de paz.
La jefa de MINUSCA también destacó su visita conjunta con el Primer Ministro de RCA a Sam Ouandja, cerca de la frontera con Sudán, que ha sido bajo el control de grupos armados durante décadas.
‘Transformación en curso’
La acción coordinada de las fuerzas de seguridad y defensa nacional apoyadas por la Misión, ha permitido restablecer allí la autoridad del Estado. También se ha reanudado la asistencia humanitaria y para el desarrollo.
“La transformación en curso en Sam Ouandja muestra que es posible romper ciclos de conflictos de una década y restablecer la autoridad del Estado incluso en regiones que han conocido una presencia estatal limitada o nula”, cree el jefe de MINUSCA.
La Sra. Rugwabiza advirtió a los embajadores que había tensiones crecientes y una situación de seguridad que se deterioraba rápidamente en las fronteras del país con Chad, Sudán del Sur y Sudán, luego de la lucha por el poder militar en curso que estalló en Jartum en abril.
La República Centroafricana se enfrenta ahora a una afluencia de refugiados y retornados que necesitan urgentemente protección y asistencia.
Ella dijo que las minas terrestres y otras municiones también continúan representando una amenaza significativa para los civiles, las fuerzas de paz y los actores humanitarios en el país. La Misión sigue haciendo frente a la amenaza mortal.
Tolerancia cero
Violaciónes de derechos humanos continúan causando seria preocupación, también. La presencia de la ONU en la República Centroafricana sigue alentando a las autoridades a iniciar investigaciones independientes y transparentes sobre violaciones, abusos e infracciones del derecho internacional humanitario por parte de todas las partes en conflicto.
Valentine Rugwabiza reiteró que la propia Misión se está apegando estrechamente al mandato del Secretario General política de tolerancia cero con las violaciones de los derechos humanos, incluida la conducta sexual inapropiada.
El 9 de junio, la ONU anunció la repatriación de una unidad de 60 militares de MINUSCA por graves denuncias de explotación y abuso sexual contra algunos miembros. La Misión, estipuló su jefe, “no escatimará esfuerzos para prevenir nuevos casos y garantizar que todo el personal uniformado y civil respete la política de tolerancia cero del Secretario General, incluso mediante la mejora de las medidas preventivas y de respuesta”.
Papel de la mujer
La jefa de ONU Mujeres, Sima Bahous, también informó a los embajadores sobre las condiciones que enfrentan las mujeres en todo el país, elogiando las leyes nacionales vigentes que protegen los derechos de las mujeres.
Como ejemplo, destacó la ley que establece que todos los órganos de decisión deben tener una cuota de al menos 35 por ciento de mujeres, que rige hasta 2027. Pero, lamentó, “es su implementación, cumplimiento o financiación inadecuadoseso les está fallando a las mujeres de la República Centroafricana”.
Los años de conflicto y crisis humanitaria han exacerbado muchos problemas que afectan a las mujeres y las niñas, limitando su capacidad de participar ‘plena, equitativa y significativamente’ en sus comunidades, dijo la Sra. Bahous.
Dijo que durante el próximo referéndum y las próximas elecciones, era importante que se permitiera a las mujeres activistas decir lo que piensan librementemientras que las organizaciones de mujeres deben contar con los recursos que necesitan para impulsar la paz y la cohesión social en sus comunidades.
Se debe permitir que las candidatas se postulen para cargos públicos sin amenazas ni acoso, enfatizó.
Hizo un llamado a los socios internacionales para que trabajen junto con el gobierno y la sociedad civil del país para garantizar que esos “próximos hitos contribuyan a la paz en lugar de arriesgarse a una mayor inestabilidad”.
