El secretario general de la ONU, António Guterres, expresó su profunda preocupación por la población civil, instando a la máxima moderación y a que se hagan «todos los esfuerzos diplomáticos» «para evitar una conflagración más amplia».
Durante el día se siguieron informando de decenas de muertes y cientos de heridos, incluso por el lanzamiento de cohetes por parte de militantes palestinos en ciudades israelíes y la respuesta de Israel a los ataques aéreos en la Franja de Gaza.
El Consejo de Seguridad de la ONU decidió convocar consultas de emergencia el domingo a las 15:00 horas en la sede de la ONU en Nueva York para discutir la crisis.
Mortal terremoto azota Afganistán
Un gran terremoto sacudió Herat, Afganistán, la madrugada del sábado, matando al menos a 100 personas y desencadenando una serie de misiones de rescate y evaluación por parte de agencias de la ONU, socios y autoridades de facto.
Las evaluaciones iniciales indican que el terremoto de magnitud 6,3 causó muertes en ocho aldeas y otras 500 personas resultaron heridas, según la última actualización de la agencia humanitaria de la ONU (OCHA).
Los socios y las autoridades locales esperan un aumento en las muertes a medida que se organizan misiones de rescate para salvar a los atrapados en los edificios derrumbados.
Los socios humanitarios han iniciado esfuerzos de socorro, desplegando apoyo médico y de traumatología a los hospitales regionales junto con refugios de emergencia, alimentos, suministros y asistencia a las personas en las zonas afectadas.
Plan de respuesta para refugiados en Armenia
La ONU y sus socios lanzaron un plan de respuesta de emergencia para ayudar a 136.000 refugiados, solicitando 97 millones de dólares para responder a las necesidades urgentes de quienes huyeron de la región de Karabaj y de sus anfitriones en Armenia.
«Hacemos un llamado a la comunidad internacional para que apoye urgentemente a los refugiados y a sus anfitriones», dijo Filippo Grandi, Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados. «El apoyo internacional es crucial para mantener esta bienvenida y permitirnos responder a las necesidades inmediatas y también aprovechar la resiliencia de esta población».
Tras la escalada de hostilidades a finales de septiembre, más de 100.000 refugiados de la región de Karabaj llegaron a Armenia en menos de una semana.
