Estos son los sombríos hallazgos de una evaluación publicada por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) el jueves, que exige medidas de remediación tanto inmediatas como a largo plazo.
Cientos de kilómetros cuadrados quedaron inundados durante el desastre y miles de kilómetros cuadrados de embalses y humedales quedaron secos.
La evaluación preliminar del PNUMA, realizada a petición del gobierno ucraniano, concluyó que las consecuencias de la ruptura de la presa se sentirán “durante décadas”, llegando mucho más allá de las fronteras de Ucrania. El informe revisó los impactos ambientales tanto aguas arriba como aguas abajo, como la contaminación química y el daño ecológico a las áreas protegidas.
Los autores del informe escribieron que “una estimación detallada de los impactos totales sobre el riego, el agua potable y el suministro de agua a la industria, incluida la central nuclear de Zaporizhzhia, y los impactos asociados a la salud humana, quedan fuera del alcance de esta evaluación rápida, pero plantean una preocupación sustancial”.
Concluyeron que se necesitarán más evaluaciones para abordar la escala total de los impactos ambientales del desastre y que el apoyo financiero y técnico es «urgente e indispensable» para una reconstrucción sostenible, la restauración de los hábitats dañados y la gestión de residuos del desastre.
Sudán: Continúan los ataques civiles
La Coordinadora Humanitaria de la ONU en Sudán, Clementine Nkweta-Salami, dice que está profundamente preocupada por los continuos informes de ataques contra infraestructura civil, y señala que «ni siquiera las salas de hospital llenas de niños enfermos y heridos están a salvo» del conflicto.
Desde el inicio de la guerra entre el ejército nacional y la milicia de las Fuerzas de Apoyo Rápido en abril, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha verificado 58 ataques contra la asistencia sanitaria, afirmó el jueves el portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric.
Atención sanitaria devastada
Más del 70 por ciento de los centros de salud en zonas de conflicto en Sudán están ahora fuera de servicio.
Durante el fin de semana, el suministro de agua en Omdurman, en el estado de Jartum, fue suspendido temporalmente después de que un centro de tratamiento de agua fuera atacado.
«Nuestros colegas sobre el terreno dicen que esto es extremadamente preocupante, dado el actual brote de cólera en el estado de Jartum y otras partes del país», afirmó el Sr. Dujarric.
Hasta el momento se han notificado más de 1.600 casos sospechosos de cólera, incluidas unas 67 muertes, «y nosotros y nuestros socios estamos intensificando nuestra respuesta al brote», añadió.
Cerrar las brechas en las políticas de cuidado infantil ofrece un alto retorno de la inversión: OIT
Proporcionar cuidado infantil continuo a los padres desde el nacimiento de su hijo hasta el inicio de la escolarización obligatoria podría generar un retorno de la inversión de más de tres veces, según la Organización Internacional del Trabajo (OIT) dijo el jueves.
“Estas inversiones también podrían conducir a reducciones de las desigualdades de género y de otro tipo, a la generación de empleos decentes, a mejoras en la salud y el bienestar, y ayudar a crear un camino hacia la justicia social”, dijo la OIT.
La investigación de la OIT que abarca 82 países encontró que cada dólar estadounidense invertido en cerrar la brecha en el cuidado de los niños entre el final de la licencia parental y el primer día de escuela, traería un aumento de 3,76 dólares en el Producto Interno Bruto global para 2035, a medida que los padres -principalmente mujeres- intercambien trabajo de cuidados no remunerado para empleos remunerados y formales. Actualmente, sólo 26 países cuentan con leyes sobre el cuidado infantil que permiten cerrar esta brecha.
La agencia proyecta que la medida crearía 300 millones de empleos en todo el mundo y reduciría la brecha global de género en los ingresos mensuales del 20 por ciento en 2019 al ocho por ciento en 2035.
La OIT dijo que proporcionar “servicios de cuidado infantil universales y de alta calidad dotados de personal de educación infantil capacitado y valorado” requeriría un gasto adicional equivalente al 1,5 por ciento del PIB mundial.
