La “misión de alto riesgo”, llevada a cabo el día anterior, estuvo marcada por retrasos en el puesto de control y carreteras gravemente dañadas. Miles de civiles hambrientos también rodearon los vehículos de la ONU y el camión de combustible en una búsqueda desesperada de alimentos y agua, lo que retrasó aún más el viaje.
El equipo informó que la funcionalidad del hospital ha mejorado desde la última misión humanitaria hace 10 días, con una disminución significativa en el número de personas desplazadas que se refugian allí, de 40.000 a 10.000.
Algunos servicios operativos
Al-Shifa tiene 120 trabajadores sanitarios y 300 pacientes. Diariamente se realizan entre cinco y diez cirugías, principalmente casos traumáticos que requieren atención inmediata.
Los servicios esenciales, como las instalaciones básicas de laboratorio y radiología, siguen operativos, junto con la atención de emergencia, una unidad quirúrgica con tres quirófanos, cuidados postoperatorios y una unidad de diálisis. Hay planes en marcha para reabrir una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de nueve camas en los próximos días.
Sin embargo, no hay servicios de maternidad ni de pediatría y hay escasez de médicos especializados, medicamentos y suministros médicos como equipos ortopédicos.
«Estas unidades podrían volver a estar operativas, pero requerirán un suministro constante de combustible, oxígeno, suministros médicos y otra ayuda», dijo la OMS. Además, la planta primaria de oxígeno quedó destruida y el hospital ahora depende de una planta más pequeña.
La asistencia sanitaria bajo fuego
La OMS sigue llamando la atención sobre el terrible estado del sistema de salud en Gaza, donde 14 de 36 hospitales siguen parcialmente operativos después de casi cuatro meses de conflicto.
La intensificación de la presencia militar y las hostilidades en el sur están obstruyendo gravemente el movimiento de los trabajadores de la salud, las ambulancias y los socios de la ONU, así como su capacidad para reabastecer a los hospitales. El personal de la agencia dijo que la situación de los hospitales de la ciudad de Khan Younis es «catastrófica e indescriptible».
La OMS también expresó extrema preocupación por los informes sobre el Hospital Al-Kheir, una pequeña instalación administrada por una ONG, que enfrenta incursiones militares y la detención de varios trabajadores de la salud. La comunicación con el hospital ya no es posible.
Personal cavando tumbas
Debido a las órdenes de evacuación en los barrios que rodean el Complejo Médico Nasser, el hospital más grande del sur, así como a las continuas hostilidades en sus alrededores, un gran número de heridos se encuentran en los terrenos del hospital, según las autoridades sanitarias de Gaza.
«UK Med, un equipo médico de emergencia internacional desplegado en Nasser, dice que nadie puede entrar ni salir de las instalaciones debido a los continuos bombardeos cercanos», añadió la OMS.
“Según los informes, el personal sanitario está cavando tumbas en los terrenos de los hospitales debido al gran número de muertes previstas y a la necesidad de gestionar los cadáveres. Esta horrible situación nunca debería ocurrir en ningún hospital”.
La OMS advirtió que el Hospital Al-Amal corre el riesgo de dejar de funcionar, ya que, según se informa, las ambulancias y los pacientes heridos no pueden acceder a las instalaciones.
La agencia de la ONU reiteró sus llamados a un alto el fuego inmediato, protección de los civiles y atención médica, y acceso sostenido para la entrega de ayuda crítica en toda la Franja de Gaza.
