Comunicado de www.vaticannews.va —
En un telegrama, Francisco expresa sus condolencias por la muerte del Metropolitano de Sofía y Patriarca de la Iglesia ortodoxa de Bulgaria. «A pesar de sus muchos sufrimientos, siguió siendo un hombre humilde y alegre, un ejemplo de una vida consagrada al Señor y a su Iglesia».
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«Un gran testigo de la fe de la Iglesia ortodoxa búlgara». Así recuerda el Papa al Metropolitano de Sofía y Patriarca de la Iglesia ortodoxa de Bulgaria, Su Santidad Neofit, fallecido el 13 de marzo a los 78 años tras una larga enfermedad, en un mensaje de condolencia dirigido a Yoan, Metropolitano de Varna y Veliki Preslav, Locum tenens del Trono Patriarcal del Santo Sínodo y a toda la Iglesia ortodoxa de Bulgaria.
El servicio al Evangelio y al diálogo
«Su Santidad Neofit -se lee en el texto- prestó un valioso servicio al Evangelio y al diálogo, y a pesar de sus muchos sufrimientos siguió siendo un hombre humilde y alegre, ejemplo de una vida consagrada al Señor y a su Iglesia». Puesto que, prosigue el mensaje de Francisco, «el Cuerpo de Cristo en la tierra -la Iglesia- es la puerta de entrada a la vida del Señor resucitado, para los fieles cristianos la muerte marca el paso de este mundo a la vida eterna».
Consolación y paz
A continuación, el Pontífice asegura al metropolitano Yoan, al Santo Sínodo y a todos los miembros de la Iglesia ortodoxa búlgara un «recuerdo especial» en sus oraciones, para que Jesucristo llene sus corazones «de consuelo y paz».
Se publicó primero como El Papa: Neofit, testigo de la fe que prestó un valioso servicio al diálogo
