El jueves, el portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric, proporcionó detalles de la oficina de coordinación de la ayuda. OCAH sobre lo difícil que se ha vuelto brindar ayuda para las agencias en el enclave debido a las limitaciones de acceso, la seguridad alimentaria y el deterioro de los problemas de salud.
«Nuestros socios informan que el acceso limitado en el norte está impidiendo el establecimiento de un nuevo centro de servicios de nutrición en esa zona», dijo a los corresponsales en la sede de la ONU en Nueva York.
OCHA también está luchando por encontrar suficiente espacio para establecer sitios de nutrición en Deir al Balah y Khan Younis. Sin embargo, dijo, los socios de la ONU están trabajando para intensificar sus esfuerzos en esas áreas, así como en Al Mawasi y la ciudad de Gaza.
Los combates interrumpen el suministro de alimentos
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) también está experimentando dificultades para entregar ayuda debido al aumento de los combates en el sur y el centro de Gaza, así como a la restricción de la ayuda humanitaria y a la falta de seguridad y orden público en el sur.
A pesar de esto, el PMA pudo proporcionar alimentos a más de 766.000 civiles en Gaza en junio, pero los suministros se han reducido debido a que la ayuda es limitada y las reservas de alimentos han disminuido.
Este mes, el PMA también pudo proporcionar 9,4 millones de comidas calientes a través de una red de más de 90 cocinas comunitarias a unas 300.000 personas, principalmente en Deir al Balah y Khan Younis, dijo Dujarric.
Señaló que el PMA informó que una “escasez de gas para cocinar, combinada con la ausencia de un suministro público de energía, está obstaculizando los esfuerzos para ayudar a mantener en funcionamiento estas cocinas y panaderías comunitarias”.
Actualizaciones de la OOPS
La agencia de la ONU para los refugiados palestinos (OOPS) destacó que los civiles en Gaza ahora viven habitualmente entre montones de desechos y aguas residuales.
Los informes también detallan el empeoramiento de las condiciones de salud debido al hacinamiento en los refugios y a la mínima disponibilidad de alimentos, ya que los suministros de agua y combustible siguen siendo limitados, así como el acceso a suministros médicos. El intenso calor del verano representa otra enorme amenaza para la salud.
Dujarric dijo que la UNRWA continúa recolectando y transportando desechos sólidos a sitios temporales este mes, aunque más lentamente ahora que el combustible escasea.
La falta de combustible también puede dificultar el mantenimiento de la línea de alimentación eléctrica de la planta desalinizadora de agua de mar del sur de Gaza, señaló.
Dijo que mientras la UNRWA trabaja para proporcionar refugio a las personas desplazadas en Gaza, “Las repetidas oleadas de desplazamientos están desgastando los refugios improvisados, que hay que desmontar y volver a montar..”
Dos niñas en Gaza.
