Comunicado de www.vaticannews.va —
En un mensaje, a un mes del proceso electoral, los integrantes de la Conferencia Episcopal mexicana manifiestan que con la aportación de pequeñas y grandes acciones de millones de ciudadanos en su trabajo y con la responsabilidad de los gobernantes, deben sumar los anhelos de las jóvenes generaciones que heredarán lo mejor de su país
Noticias del Vaticano
“Procuren, planten, trabajen por el Bien Común”a un mes del proceso electoral del pasado mes de junio, los obispos de la Conferencia Episcopal de México publicaron un mensaje en el que manifiestan que “con el favor de Dios y el compromiso de todos, el país está de pie y la vida sigue adelante, con el aporte de pequeñas y grandes acciones de millones de mexicanos en su trabajo de cada día, también con la responsabilidad de los gobernantes y, sobre todo, debemos sumar los anhelos de las jóvenes generaciones que heredarán lo mejor de México y se convertirán, pronto, en responsables de su presente”.
Ejemplo de la ciudadanía
Respeto para construir juntos el futuro
Tras recordar que “muchos ciudadanos podrán sentirse satisfechos, otros, por distintos motivos muy válidos, han vivido los resultados con frustración”, sin embargo los prelados escriben que “entre unos y otros debe haber respeto para construir juntos nuestro futuro, unos y otros formamos el mismo país”.
Asimismo piden “que no prevalezca el sentimiento de vencedores o vencidos, sino el de ciudadanos de la misma patria que debemos construir con el talento de todos, sin exclusión”.
Como obispos de la Iglesia católica presente en México, los obispos explica que en su momento felicitaron a la virtual presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y a quienes han sido elegidos para algún cargo popular.
Asimismo recuerdan que san Juan Pablo II, en su Carta a las Mujeres de 1995, enfatizó el genio de la mujer y su contribución en todos los ámbitos de la vida, incluyendo la política y el liderazgo social, de tal forma que “la mayor presencia de la mujer en la sociedad se revela determinante para hacer visibles y superar ciertas formas unilaterales de ver el mundo”, para construir una sociedad más inclusiva.
Hacia la construcción de la unidad nacional
Sin embargo, ahora nos permitimos hacerles un llamado respetuoso para que dirijan sus decisiones y primeras acciones, hacia la construcción de la unidad nacional, la inclusión de todos en el proyecto de nación democrática que tenemos desde hace décadas, hacia el fortalecimiento y autonomía de los tres poderes del Estado con todas sus instituciones, y hacia la vigencia plena del Estado de Derecho, en el respeto a los derechos humanos fundamentales. Sin duda todo esto forma parte del mandato recibido en las urnas el 2 de junio pasado.
Hacen también un llamado a todos los mexicanos, para ir más allá de la contienda electoral y colocarse ahora con ánimo y esperanza, con la conciencia de que el futuro del país “necesita de todos, jóvenes y adultos, sociedad civil y fuerzas armadas, comunicadores y educadores, empresarios y lideres sociales, obreros y campesinos, profesionistas, comerciantes y toda la clase laboral”.
Y recuerdan que en su documento “Que en Cristo Nuestra Paz, México tenga vida digna” del 2010, afirmaron que “la construcción de un México más justo y fraterno es tarea de todos”.
Esta convicción sigue vigente hoy más que nunca, y nos llama a trabajar unidos por el bien común de nuestra nación, superando divisiones y construyendo puentes de diálogo y reconciliación. En este espíritu, cada una de nuestras familias, de nuestras comunidades en todos los ámbitos, los partidos políticos y los servidores públicos, las distintas iglesias y grupos religiosos, todos, sin distinción, debemos responder a una vocación de grandeza y unidad, como corresponde a México y su historia.
Superar la desigualdad social y la pobreza
Debemos dirigir nuestra mirada y nuestros esfuerzos a superar la desigualdad social y la pobreza, debemos tener como prioridad el bien común, para lograr mejores oportunidades para todos, debemos anhelar la superación de la violencia y la criminalidad que tanto mal nos causa, debemos buscar como construir la paz y la armonía entre todos.
Fieles a su tradición espiritual, invitan a todos los mexicanos a orar por quienes asumen la responsabilidad de gobernar. Y “confiados en el amor de Santa María de Guadalupe, corazón de nuestro pueblo”, encomiendan el futuro de México a su intercesión maternal.
Se publicó primero como Los obispos de México piden que se trabaje por el bien común