Comunicado de www.vaticannews.va —
Al margen de los trabajos del Sínodo en el Aula Pablo VI, el Pontífice retoma un aspecto clave para una sana vida familiar: el diálogo, más allá de las incomprensiones.
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En una pausa de los trabajos de la segunda sesión de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, el Papa Francisco dirige un breve videomensaje en el que se refiere a un valor universal: el diálogo como elemento fundamental en una sana vida familiar.
«Solo se me ocurre, asevera el Pontífice, que en la familia hay que dialogar. A veces con algún encontronazo, pero siempre hay que dialogar, siempre».
Para el Obispo de Roma, «una familia que no dialoga es una familia muerta». Por último, el Sucesor de Pedro imparte su Bendición Apostólica y, como es habitual, pide que recen por él.
En los últimos días, durante la Asamblea Sinodal, al Pontífice le han pedido que grabara otros videomensajes, generalmente breves. Por ejemplo, uno de los miembros más jóvenes le solicitó unas palabras y en dicha ocasión, el Papa animó a las nuevas generaciones a caminar siempre y a no detenerse. «Los jóvenes cansados son los primeros en corromperse», advirtió.
Se publicó primero como El Papa: Una familia que no dialoga es una familia muerta