El Cardenal Presidente de la Conferencia Episcopal Italiana inició ayer y concluye hoy la serie de coloquios como enviado del Papa. Hoy la visita al Presidente Zelensky.
Noticias del Vaticano
Una serie de reuniones de trabajo, pero también de oración, que han puesto sobre la mesa diversos aspectos de una tragedia que dura ya quince meses. Desde su llegada ayer, 5 de junio, a Kiev como enviado del Papa, el cardenal Matteo Zuppi se ha sumergido en el drama de la guerra en Ucrania, hablando con autoridades institucionales y religiosas, entre ellas, hoy el presidente Zelensky, con el objetivo de «alcanzar una paz justa y apoyar gestos de humanidad para aliviar las tensiones», como ha dicho en una nota de la Oficina de Prensa vaticana en vísperas de su partida para Kiev.
Ayer fue sin duda un momento emocionante, con la parada para rezar en Bucha, la ciudad que tristemente fue noticia al comienzo del conflicto por la masacre indiscriminada de civiles, abandonados en las calles o arrojados a fosas comunes, al borde de la cual también había rezado el cardenal Krajewski. También ayer, el cardenal Zuppi se detuvo a hablar con Dmytro Lubinets, encargado de la defensa de los derechos humanos, para tratar la cuestión de los niños ucranianos en los territorios ocupados por Rusia y también la situación de los prisioneros, incluidos los civiles. Otra reunión importante fue con el Consejo de Iglesias y Organizaciones Religiosas.
Por último, en la jornada de hoy, que comenzó con una visita de oración a la catedral de Santa Sofía, tuvo lugar un diálogo entre el enviado del Papa y el Presidente ucraniano Zelensky, al que siguieron otras reuniones con las que concluirá la misión.