“Deploramos las múltiples ejecuciones llevadas a cabo esta semana en Kuwait y Singapur y nos oponemos a la pena de muerte en todas las circunstancias”, dijo ACNUDH Portavoz Seif Magango.
Moratoria inmediata
“Instamos a Kuwait y Singapur a que establezcan de inmediato una moratoria de las ejecuciones y se unan a los más de 170 Estados que hasta ahora han abolido o introducido una moratoria de la pena de muerte, ya sea en la ley o en la práctica”, agregó.
El gobierno kuwaití emitió un comunicado el jueves diciendo que cinco presos habían sido ejecutados en la Prisión Central del país, incluido un hombre con presuntos vínculos con el grupo terrorista ISIL, que fue condenado por el atentado con bomba contra una mezquita chiíta en Kuwait en 2015, en el que se produjeron 27 muertos y más de 200 heridos.
Según los fiscales kuwaitíes, tres hombres condenados por asesinato y uno por tráfico de drogas se encontraban entre los ejecutados.
Singapur: primera mujer ejecutada en casi 20 años
En Singapur, un hombre y una mujer fueron ejecutados por cargos no relacionados de tráfico de drogas esta semana en la prisión de Changi de Singapur.
Saridewi Djamani, la mujer de 45 años condenada a muerte en 2018 por el tráfico de 1,05 onzas de heroína, es la primera mujer ejecutada en Singapur desde la ejecución en 2004 de Yen May Woen, de 36 años, también tras una condena por tráfico de drogas.
“La pena de muerte es incompatible con el derecho fundamental a la vida y el derecho a no sufrir tortura ni otros tratos inhumanos y debería eliminarse como castigo de todas las leyes en todas partes”, dijo el Sr. Magango.
