La conmemoración del Día Internacional de Nelson Mandela, que se celebra el 18 de julio, rinde homenaje a su lucha por la libertad y la igualdad, tanto en su país como en el mundo.
Mandela, conocido cariñosamente por el nombre de su clan Xhosa, Madiba, pasó casi tres décadas en la cárcel por hacer frente a los abusos contra los derechos humanos y las graves injusticias contra los sudafricanos negros.
‘Transformación a través del perdón’
Fue puesto en libertad en 1990 y elegido presidente cuatro años después en las primeras elecciones multirraciales del país.
Csaba Kőrösi, presidente de la Asamblea General de la ONU, dijo que el notable viaje del Sr. Mandela sirve como un ejemplo de transformación a través del perdón, ya que legó una Sudáfrica multirracial y democrática muy diferente del estado racista en el que nació.
“El compromiso de por vida de Madiba con los derechos humanos encarna un principio fundamental de esta organización: no podemos dejar a nadie atrás”, agregó.
Hónralo a través de la acción.
El Secretario General de la ONU, António Guterres, llamó al Sr. Mandela uno de los más grandes héroes de la humanidad.
“Nelson Mandela fue un coloso de coraje y convicción”, dijo. “¿Cómo rendimos homenaje a un gigante así? A través de palabras de respeto, ciertamente. Pero honramos mejor a Madiba a través de la acción”.
El Sr. Guterres pidió acción contra el racismo, la discriminación, el odio y “extinguir los legados del colonialismo”. También hizo un llamado a promover la igualdad, los derechos humanos “y sobre todo, la justicia”.
El jefe de la ONU dijo que la pandemia de COVID-19 ha expuesto las desigualdades globales y “tres años después, la necesidad de cerrar la brecha de la justicia global es más urgente que nunca”.
Cambiar el mundo
Señaló la injusticia en el corazón del sistema financiero internacional que tiene sus raíces en el colonialismo. Hasta el día de hoy, África está subrepresentada en la arquitectura financiera global y el continente carece de un asiento permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU, dijo.
Recordó que el Sr. Mandela abordó estos temas en un discurso ante la ONU hace casi 30 años, argumentando en contra de la distribución desigual de los recursos y el poder de toma de decisiones.
“El mundo todavía está esperando un cambio”, dijo Guterres. “En última instancia, necesitamos una reforma fundamental del sistema financiero internacional. Pero también debemos apoyar a las economías en desarrollo con pasos concretos que podamos tomar hoy”.
Pidió revisar urgentemente los modelos de negocios de los bancos multilaterales de desarrollo, proporcionar un plan de estímulo de desarrollo sostenible y establecer un alivio de la deuda que apoye las suspensiones de pagos, entre otras medidas.
El ex embajador estadounidense Andrew Young (en la pantalla), político y activista estadounidense, habla en la ceremonia anual para conmemorar la vida y el legado de Nelson Mandela.
Esperanza, libertad y dignidad
El político y activista estadounidense Andrew Young, ex embajador de EE. UU. ante la ONU, compartió recuerdos del Sr. Mandela, quien fue a la vez amigo y hermano.
“Escuchamos cosas que nos parecen imposibles: que invitó a su carcelero a sentarse con su familia en su inauguración y que constantemente hizo un esfuerzo por unir a Sudáfrica a pesar de todas sus divisiones”, dijo.
El Sr. Young, que ahora tiene 91 años, afirmó que su propio país lucha hoy con algunas de las mismas dinámicas que plagaron la era del apartheid en Sudáfrica.
“Estamos agradecidos por el ejemplo que dio el presidente Madiba”, dijo. “Y estamos agradecidos con esta institución por seguir esa tradición y mantener viva la esperanza de libertad y dignidad, y darnos cuenta de que podemos ser libres a pesar de las cadenas culturales que nos atan”.
