En la resolución 2724 (2024), adoptada con 14 votos a favor y una abstención (Rusia), el Consejo también llamó a todas las partes en el conflicto a buscar una solución sostenible a los combates a través del diálogo.
El conflicto entre las Fuerzas Armadas Sudanesas (SAF) y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) estalló en abril del año pasado en la capital y sus alrededores. En los once meses transcurridos desde entonces, los combates se han extendido, cobrando miles de vidas, expulsando a millones de personas de sus hogares y sumergiendo a Sudán en una terrible crisis humanitaria.
En la resolución, el Consejo de Seguridad expresó grave preocupación por el deterioro de la situación humanitaria, incluidos “niveles de crisis o peores” de inseguridad alimentaria aguda, particularmente en la región de Darfur, así como por los informes continuos de violaciones del derecho internacional humanitario y de derechos humanos, incluidas Casos de violencia sexual en conflictos.
Instó a todas las partes en el conflicto a “garantizar la eliminación de cualquier obstáculo y permitir un acceso humanitario pleno, rápido, seguro y sin obstáculos, incluso transfronterizo y transfronterizo, y cumplir con sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario, incluida la de proteger a los civiles y a las personas civiles”. objetos y sus compromisos en virtud de la Declaración de Compromiso para Proteger a los Civiles de Sudán (‘Declaración de Jeddah’)”.
También alentó a Ramtane Lamamra, Enviado Personal del Secretario General, a utilizar sus buenos oficios con las partes y los vecinos de Sudán, complementando y coordinando los esfuerzos de paz regionales.
Panel de expertos en sanciones a Sudán
En otra acción del viernes, con 13 votos a favor y dos abstenciones (China y Rusia), el Consejo de Seguridad renovó por un año más el mandato del Panel de Expertos del Comité de Sanciones a Sudán 1591, que expira el próximo martes.
El panel se creó el 29 de marzo de 2005 para ayudar al comité a supervisar la aplicación de las sanciones impuestas por el Consejo (embargo de armas, prohibición de viajar y congelación de activos) a varios grupos e individuos armados en Sudán.